En cuanto a esta Ciudad,
su nombre debería ser
Otoño.
Y hasta podría ser más preciso aún
sin faltar a la verdad
y llamarse
la de los Buenos Otoños.
Esta ciudad resplandece
durante abriles y mayos.
De hojas secas color de oro,
de ventiscas,
de plomizos horizontes,
de lloviznas y paraguas.
De olor a café,
remolinos, noches claras,
aire que se anda cortando...
Tal vez haya sido el Otoño
el mentor
de algunas gestas libertarias.
Esta ciudad bien podría
ser de los Buenos Otoños
y nadie podría alegar
nada...